El 31 de mayo de este año tuvo lugar en Nempla, barrio de Chacarita, la presentación del Fanzine #2 de En el margen, revista de psicoanálisis, Modos del lazo entre analistas: efecto y afectación en la experiencia del análisis. Gabriela Odena, Sebastián Salmún, Laura Gobbato y María José Colombo estuvieron a cargo de dicha presentación. En esta oportunidad compartimos las palabras de Laura Gobbato.
Delegación editorial
Agradezco a En el Margen la convocatoria a esta publicación y el gesto de invitarme a recibirlo con palabras, la delicadeza del modo en que me llegó tal invitación.
De alguna manera, En el margen me ha recibido.
Hace un tiempo que esta revista me interpela, aloja y habilita en y con su novedad no institucional. Ese resquicio, que es a la vez hendija, rastro, abertura y ocasión, ese borde o sitio liminar creativo y potente, se ha convertido para mí en un lugar de arribo, de intercambio. No sólo por su original transmisión del psicoanálisis y los debates que propone, sino por su pertenencia, a mi criterio, a la filiación y al legado cultural problematizante que se está intentando aniquilar y de la cual nuestro discurso es heredero. Se permite ser explícitamente político, sensible a los acontecimientos actuales y permeable a nutrirse y compartir con la literatura, la filosofía, la antropología, sin prejuicios ni dogmatismos.
En el margen me ha hecho leer, pensar y escribir, porque es una apuesta a leer, pensar y escribir, me sorprende, conmueve y afecta. Hace pasar un deseo, es deseo, hay ánima y ánimo, anima, alienta a otras formas del lazo.
Me gusta jugar con la idea de telares colectivos que promueven un intercambio plural y una posibilidad creativa y expresiva, donde confluyen rigurosidad y apertura, donde la formación es por añadidura y la diferencia es un color más del entramado.
Texto es tejido y tela, textura y costuras, agujero y lanzaderas. En muchas culturas, más aún en las ancestrales de nuestros pueblos originarios, la escritura es un tejido, un anudamiento. Hay hilos fijos e hilos que se mueven, hilos que sostienen e hilos transversales que van construyendo una trama. La urdimbre sostiene y permite el desplazamiento y el juego de la lanzadera que va armando un tapiz.
En tiempos deshumanizantes e individualistas, esta apuesta dinámica y plural se transforma en una urdimbre generosa que permite a muchos tejer vinculándonos, y a la vez, despejando y revitalizando nuestra práctica.
Tengo la convicción de que está intrínsecamente ligada no sólo a la experiencia del análisis, fundamental y fundante, sino también a la del tipo de lazo que establecemos con otros practicantes y también con otros discursos y disciplinas.
Recorrer los textos de mis compañeros de fanzine me permitió confirmar esto y reconocerme en muchas preguntas y reflexiones, es más, podría haber escrito muchas de ellas, y creo que viceversa, ellos podrían haber escrito las mías. Ustedes van a leerlas en su singularidad, con sus nombres propios, porque esa escritura no es sin los estilos y el rasgo de cada quien, pero en este recibimiento, elijo entramarlas al modo de un tapiz colectivo porque creo que eso hicimos y eso hace En el margen.
Entonces, breve recorrido por este tapiz, a modo de collage para que visualicen, a modo de previa para que atisben y a modo de aperitivo para que abran el apetito.
La apuesta a la horizontalidad y a la aventura de compartir e intercambiar en la calle, o en la playa o en un club de bochas la experiencia de practicar el psicoanálisis, con la presencia de los cuerpos y la potencia del des encuentro.
Lo posible y lo imposible en las instituciones. Lo común, las zonas de encuentro, la recreación de espacios, lugares y tiempos, la invención de modos de estar.
Lo colectivo como aquella construcción no obvia que posibilita no ceder ante las instituciones. La emergencia de espacios del decir.
¿Sólo es formación el lazo psicoanalítico? ¿Es lo mismo apostar al lazo que a la autoridad? ¿Cuáles son los efectos de la institucionalización del psicoanálisis?
¿Por qué nos importa el qué nos enlaza? ¿Cómo seguir pensando la transferencia de trabajo?
Sin lectura no hay formación y la formación no es otra cosa que el desarrollo de una lectura. No hay otra formación que la de la lectura.
¿Es posible practicar como analistas lo que huelga entre colegas? Sostener el encuentro entre analistas de diferentes movimientos es una apuesta que hace lugar a la proliferación de las transferencias. Entre derivas, ficciones y devenires, y orillando un entre, intentar un decir plural.
¿Qué se efectúa al formar parte de una reunión de analistas? ¿Requiere de la suspensión del yo?
Reinventar modos de nombrar, apoyarnos en el arte, clinicar, hacer a mano.
Apostar al mismo tiempo a una operación de lectura, al porvenir de un lazo y de un modo horizontal de intercambio.
Los invito a enlazarse a este texto. Gracias.
Rosario – Buenos Aires 31 de mayo de 2024.
Laura Gobbato. Psicóloga, egresada de la Universidad Nacional de Rosario. Especialista en Psicología clínica, institucional y comunitaria por la misma universidad. Practica el psicoanálisis en la ciudad de Rosario.
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