¿Cómo y cuándo descubrió el psicoanálisis?
Es algo gracioso, me hicieron pensar y recordar cómo había llegado al psicoanálisis, el primer acercamiento fue al inconsciente, durante mi adolescencia, cuando escuché hablar del complejo de Edipo con el Padre, huí despavorida. Ya más adelante, estudiante de psicología, empecé a analizarme, lo que me acerca a empezar un análisis son fantasmas sobre lo que ahora llamaría el estrago materno. Supe muy rápidamente que la función paterna era estructural. Sigue siendo así, pero la práctica del psicoanálisis se volvió mucho más sutil y precisa: la metáfora mostró su “error”, el padre se convierte en los nombres del padre como dimensiones del decir, la articulación del decir necesita de la pulsión y, sobre todo, el invento del objeto “a” compromete al analista y a los cuerpos en el desarrollo de cada análisis.
Interesada profundamente por el psicoanálisis, ya Freud y Lacan, me voy alejando paulatinamente de la psicología. Muchos, muchos años de análisis me enseñaron que el psicoanálisis es una práctica y su saber es muy distinto del conocimiento universitario. Se trata de un saber sobre el inconsciente que se va descubriendo en el análisis y sin el cual no existe el psicoanalista ni el deseo del analista. Definiría el psicoanálisis como una práctica de lo imposible, que nos desafía a fundamentar y atravesar sus problemas. Una práctica que para mí ha implicado el propio análisis, la enseñanza del psicoanálisis, la supervisión, un profundo lazo con otros en una escuela de psicoanálisis en la que se practica el dispositivo del pase, por el que he pasado en dos ocasiones. Experiencia invaluable.
¿Qué considera que el psicoanálisis puede aportar a nuestra contemporaneidad?
El psicoanálisis, es un lazo de discurso, el último discurso en aparecer y tiene una particularidad que es la de leerse a si mismo y encontrar los propios síntomas. Ese lazo tan particular, ese discurso, en un análisis no se desencadena sin decir, lo que llamamos con Freud la regla fundamental: hable, lo escucho. Se atribuye al analista, de ese modo, un saber sobre los síntomas, el malestar que producen, y el goce inevitable que los acompaña. Ese saber, que se atribuye al analista será del que se va apropiando el analizante, en el trayecto del análisis.
¿Cuál es el deseo del analista, del que se habla tantas veces? Lo entiendo como un deseo, sin ideal, sin bien para el analizante. Un deseo de que pueda encontrar su propia orientación, con los significantes del analizante, poder hacer algo con su pulsión. Poder decidir, elegir. Esto no es sin la castración y algunas veces, no todas, con un lugar para lo femenino que, hombre o mujer, no sea de rechazo. La castración, lo que trae es un lugar de falta para poder desear, tiene que haber algo que falte. Es por eso que el analizante ama durante su análisis a su analista, ama ser amable para él, ser “sabible”, ese encuentro se da o no se da.
No es poco eso que he descripto. Es un pasaje crucial de un lugar de objeto del deseo de Otro a un lugar de sujeto de deseo.
Verónica Cohen. Psicoanalista. AME Escuela freudiana de la Argentina. Cofundadora de la Fundación del campo lacaniano. Editora de la revista LaPsus Calami. Autora de numerosos artículos publicados en revistas internacionales, Jornadas y libros: TEJER EL VIENTO. FREUD A PARTIR DE LACAN. Ediciones Kliné; El hilo en el laberinto, Lectura del Seminario La angustia y sus referencias. Ediciones Kliné – Ediciones Oscar Masotta. Bs. As., 2013 (2da. Ed.); El hilo en el laberinto. Lectura del Seminario De un Otro al otro, Ediciones Kliné – Ediciones Oscar Masotta, Bs. As., 2015; Dimensiones del síntoma. Ediciones Kliné, Colección Variaciones. Buenos Aires, 2016, entre otros.
Gisela Avolio, actualmente trabaja como analista, es miembro fundadora de la Escuela Freudiana de Mar del Plata, y miembro de Fondation Européenne pour la Psychanalyse. Fue Residente de Psicología en el Htal. Subzonal especializado Neuropsiquiátrico Dr. Taraborelli (Necochea, Bs. As.). Dicta clases en las actividades de la Efmdp, y allí coordina el dispositivo Práctica psicoanalítica con Niños y Adolescentes, desde 2010; actualmente es docente y supervisora de la Residencia de Psicología Clínica de los Hospitales Provinciales de Necochea y Mar del Plata. Y dicta clase anualmente en Centre IPSI de Barcelona. Desempeña la práctica del psicoanálisis en el ámbito privado.